Entre todo el caos y la importancia de la última cumbre, una noticia no está teniendo la suficiente repercusión, y es que Croacia, se ha convertido en el segundo país de la antigua Yugoslavia en entrar en la Unión Europea. No es una decisión poco importante, y menos en las circunstancias en las que se encuentra la Unión Europea.
Quizá, el poco peso demográfico o económico de Croacia no nos llevan a salir a las calles a celebrar con alegría la noticia, pero debemos pensar que Croacia no solo será un nuevo miembro de la Unión Europea en el momento en que otros se cuestionan si continuar perteneciendo al club comunitario, sino que también acogerá el euro como moneda oficial, justamente también en el momento en que la moneda única tiene menos credibilidad.
Pero no solo por estos motivos es importante la in corporación de Croacia como nuevo país de la Unión Europea, también está el aspecto simbólico. Croacia ha hecho grandes avances en todo lo referente a los derechos humanos y la democracia interna, llevando al Tribunal de la Haya para asuntos de la exYugoslavia a los mayores carniceros de la guerra de los Bálcanes que aun quedaban en este país. Esos esfuerzos, así como limitar el nivel de belicosidad con sus países vecinos, es una de las noticias más importantes para la región.
Con su entrada en la Unión Europea, se abren muchas posibilidades económicas para el país, por ejemplo a nivel de turismo e industria con Italia, así como una mejora en sus exportaciones con la nueva moneda única. Además, en el aspecto internacional, Croacia ganará peso pudiendo influir con la Unión Europea en un escenario internacional.
